Nuestro invitado nos cuenta su experiencia de trabajo con jóvenes rurales. Inicialmente, antes de graduarse, durante sus prácticas hizo parte del sistema Sembrar Paz, que arranca como responsabilidad social de UNIAGRARIA, con el apoyo del antiguo rector, Jorge Gaitán, proyecto que ya tiene aproximadamente 15 años. Para ser parte de ese programa es necesario tener competencias de acercamiento con jóvenes, ya que está dirigido a estudiantes de colegios rurales de octavo y noveno grado. A la fecha se tiene un aproximado de 30000 estudiantes egresados del programa Sembrar Paz en el sector rural.
Uno de los retos que se tiene con un proyecto que se quiere aplicar en el territorio, es la continuidad, ya que, en principio, los proyectos son formulados a 6 meses o un 1 año, lo que genera en las comunidades una intermitencia y desarticulación entre los proyectos y la comunidad. Es por lo anterior que UNIAGRARIA prioriza el desarrollo endógeno, que se refiere a la atención de las necesidades de las comunidades, para que los proyectos no sean solo formulados por los expertos, sino que sean formulados con las comunidades, ya que son ellas quienes conocen su territorio, su necesidad y que al momento de ellos participar, se garantiza que éste va a tener una vida útil, que no depende de externos y que, si la universidad o el alcalde se van del territorio, ellos pueden continuar con su proyecto.